Comentario de una pintura.

Naturaleza muerta.

Giorgio Morandi

Museos Vaticanos, Roma, Italia

Óleo de 28 cm  x 42,5 cm

Podemos observar una mesa con siete objetos diferentes y cotidianos, jarrones y botellas, entre otros. 

Hay un estudio de la luz y el color, de la perspectiva y de la localización de estos objetos. Tiene un grado de iconicidad media, se les nota incluso textura. Es una vista frontal con luz lateral izquierda al parecer natural. 

Objetos cotidianos de uso doméstico donde dedica una principal atención al objeto mismo y su existencia, es decir los objetos "son", es  malo que Cezanne le llamaba la "manzaneidad", es decir la esencia del objeto, de su existencia. Capta la luz y color en su máximo expresión. 

Juega una armonía con sus texturas visuales y colores brillantes, los limpia y directa del natural al parecer pasando por una ventana. Los objetos en armonía horizontal, tienen un dialogo entre ellos, la postura hace que la protagonista del cuadro sea la luz. Los gama de colores tierra que junto a la luz suaviza de manera armoniosa el contraste de los dos primarios. 

Sin simbolismos, estos objetos crean una historia cada uno por el hecho de servir a su cometido. Hay una suavidad en el cuadro casi tan frágil como los objetos y a su vez áspero y duro. La maestría de este pintor deja huella y nadie indiferente al que observa su cuadro.